EL VALOR DE COMPARTIR:

El valor de compartir es, y será siempre, prioridad para muchos. El compartir es algo básico, que todos deberíamos de practicar, pero a la mayoría se le olvida. Es por eso que hoy vengo a recordar lo valioso e importante que es el valor de compartir. Añadiendo así, también, una nueva perspectiva y tocando diferentes puntos respecto al tema.

El hecho de compartir va mucho más allá de sólo dar a los demás, de compartir regalos y experiencias de vida que enriquezcan y nutran a aquellos con quienes compartimos. Compartir se convierte en un proceso catártico que es capaz de purificarnos y limpiarnos desde lo más profundo, sacar aquello que llevamos dentro y soltarlo al mundo, abre espacio para que podamos enriquecernos de mayores y mejores maneras. Cuando estamos llenos de cosas y las guardamos para nosotros mismos, empiezan a ocurrir procesos internos que pueden llevarnos a estados de suma negatividad; o puede que no, pero no por ello debemos de evadir nuestra responsabilidad como individuo, persona, humano, civil, etc..., de compartir. Porque como dice Dalai Lama:

"Nuestro mayor deber es ayudar al prójimo. Y si no puedes ayudar, por favor, no hagas daño"

 

En la naturaleza existen fenómenos que ayudan a conservar el balance de las cosas, de la materia y las energías, y que se replican en nuestro interior. Por ello el compartir se vuelve algo inherente, porque es algo fundamental para el progreso de la humanidad.

Cuando guardamos en nuestro interior las cosas buenas que nos han sucedido, nuestro conocimiento e información, nos reservamos la dicha, la fortuna, la alegría, y, tarde que temprano, el valor de las ideas se perderá y simplemente se desperdiciará.

 Es importante recalcar que el compartir debe ser un proceso; sí, solo eso, todo lo demás vendrá por añadidura, el cual debe de empezar por tu ser, debes de reflexionar tus ideas y hacerlas tuyas, debes empezar a compartir contigo mismo porque; si no es así, ¿Cómo podrás interesarte en los demás si no te interesas a ti mismo? O también:

"¿Por qué te fijas en la astilla que tiene tu hermano en el ojo, y no le das la importancia a la viga que está en el tuyo?" Mateo 7:3

Así es como se inician grandes ideas: cuando en verdad comienzas a interesarte y a ponerle amor a lo que  deseas. Porque solo empezando a conocerte, podrás saber lo que deseas y lo que te apasiona en verdad.

Así pues, recuerda que tampoco debes hacer de estas acciones simples ínfulas, debes saber bien que el compartir, debe ser algo valioso y con la coletilla de: "debe ser un proceso catártico", para todos nosotros, y que nos haga crecer como personas de una manera mutua, y estar en máxima plenitud. Aprende de los demás. No debes negarte nunca a nuevas perspectivas. Analiza muy bien cada situación, para poder sacar las mejores conclusiones.

Comparte esto a quienes lo necesiten, a todos los que puedas. Para que juntos, podamos llevar este conocimiento áurico y poder iluminar, aunque sea un poco, al mundo. Es lo mínimo que podemos hacer. Bendiciones.